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DISPONIBLE EN: Archivo Cinematografico y Videoteca
Nº TÍTULO ARCHIVO: 00002397
Título original: IRONIA DEL DINERO, LA = BONJOUR LA CHANCE
Otros títulos paralelos: BONJOUR LA CHANCE
Director/realizador: Neville, Edgar; Lefranc, Guy
Productor: Neville, Edgar
Nacionalidad: España - Francia
Año de producción: 1955
Argumento: Neville, Edgar
Música: Muñoz Molleda; Miraski, Paul
Guionista: Andrei, Yanick; Neville, Edgar
Director de fotografía: Pahle, Ted; Fraile, Alfredo; Barry, Maurice
Montaje: Ontañon, Sara; Isnardon, Robert; Isnardon, Monique
Cortometraje o Largometraje: Largometraje
Paso: 35 mm
Tipo de emulsión: B/N
Tipología documental: Ficción
Tipología documental: Ficción
Género: Comedia
Narrador: Porcel, Pedro
Sinopsis: Un cachazudo narrador nos moraliza sobre los efectos del dinero proponiéndonos
para ello cuatro historias ejemplares: 1. Sevilla. Frasquito es un limpiabotas
gandul que una mañana es despachado del bar donde trabaja por don Nicolás,
propietario del local. De vuelta al hogar, el "limpia" es testigo de cómo le
embargan por impago la casa y los muebles. José Luis, un vecino pedante, le
ofrece un empleo de sol a sol para rehacer su vida, pero Frasquito lo rechaza.
Esa misma tarde, mientras pasea distraído, el "limpia" encuentra una billetera
repleta y, sin pararse a averiguar a quien pertenece, monta una juerga en el
bar de don Nicolás, dueño de la cartera. A altas horas de la noche Frasquito
vuelve a dejar la billetera ya casi vacía, donde la halló. A la mañana siguiente
es José Luis quien la encuentra y al devolverla, don Nicolás lo denuncia por
la desaparición del capital. 2. Una ciudad de provincias de Francia. En una
estación de tren, el cantinero y la kiosquera, Margot, están casados. La mujer
lleva una vida de aventuras con diferentes hombres. Uno de ellos, Antonio,
un día pierde un maletín lleno de billetes. El cantinero lo encuentra y quiere
devolverlo, pero Margot le insta a que se queden con él. Debido a un malentendido
entre los esposo, Margot informa a Antonio de que ha encontrado el maletín.
El amante, perseguido a causa de que el dinero tiene un origen fraudulento,
se presenta en su casa para recuperarlo. Pero en su huida Antonio vuelve a
perder el maletín. Esta vez es Feliciano, un pobre ferroviario, quien lo encuentra
y lo entrega a las autoridades. Al cabo de un año, tiempo que Margot ha empleado
en seducir a Feliciano, el dinero pasa a manos de éste quien, para desesperación
de la kiosquera, lo regala a la Catedral de la ciudad. 3.Salamanca. Sebastián
es testigo de cómo a un hombre se le cae la cartera antes de entrar a un lujoso
hotel. En sus sucesivos intentos por devolverla, Sebastián ve como el portero
le impide el acceso al edificio. De vuelta a casa, atolondrado por los acontecimientos,
Sebastián compra una serie de lotería. Una vez en el hogar, explica a Estefaldina,
su avinagrada mujer, lo ocurrido y ésta decide, sin tener en cuenta la opinión
de su esposo, quedarse con el dinero. A la mañana siguiente se enteran de que
les ha tocado el gordo y se impone la opinión de devolver la cartera. Pero
cuando Sebastián llega al hotel, el dueño del dinero se ha quitado la vida.
Sebastián queda desolado, hasta que lee en el periódico que era un falsificador
y los billetes no tenían curso legal. 4. Madrid. La última historia confronta
a dos toreros: uno guapo y con arte; el otro desgarbado y patoso, que torea
para que su padre pueda comprar las tierras en las que ha trabajado toda su
vida. El primero ve como a una turista francesa se le cae la cartera llena
de billetes y la esconde en la enfermería. Pero es el segundo quien debe ser
atendido por un revolcón que le da un toro y cuando recoge sus cosas, sin percatarse,
mete el billetero en su macuto. En el epílogo, el narrador ve una cartera en
el suelo y avisa a un transeúnte de su pérdida. Éste la recoge, agradece el
gesto y se va. Pero cuando llega otro hombre que pregunta al narrador por una
cartera que ha perdido y cuya descripción coincide con la hallada, éste desconcertado,
opta por mentir e inhibirse del asunto.